Un trabajador en un país pobre apenas puede comprar insulina para tratarse contra la diabetes
Naciones Unidas.- La insulina es una hormona que segrega el páncreas para regular la cantidad de glucosa en la sangre. Cuando el páncreas no la produce, surge la diabetes. Hace casi un siglo, en 1921 se encontró ya un tratamiento, la producción de una sustancia artificial con las mismas propiedades. Y en 1977, la Organización Mundial de la Salud decidió incluirla en la lista de medicamentos esenciales.
Más de 420 millones de personas viven con diabetes, dolencia que es la séptima causa principal de muerte y fuente de importantes de complicaciones costosas y debilitantes, como ataques cardíacos, derrames cerebrales, insuficiencia renal, ceguera y amputaciones de miembros inferiores.
En la actualidad, tres fabricantes controlan la mayor parte de la producción mundial a un precio que es demasiado caro. El suministro mensual de insulina le cuesta a un trabajador de un país africano como Ghana el equivalente a 5,5 días de salario, o el 22% de sus ingresos mensuales. En los países ricos, la gente a menudo tiene que racionarla, lo cual puede ser mortal si no reciben dosis suficientes o puede provocar algunas de las complicaciones mencionadas.
Insulina más barata
Sin embargo, la insulina demasiado cara podría ser cosa del pasado. La Organización Mundial de la Salud ha lanzado este miércoles una invitación a la industria para diversificar la producción a nivel mundial mediante la fabricación de genéricos.
"El simple hecho es que la prevalencia de diabetes está creciendo, la cantidad de insulina disponible para tratar la diabetes es demasiado baja y los precios son demasiado altos, por lo que debemos hacer algo", dijo Emer Cooke, directora de regulación de medicamentos de la OMS, al anunciar la iniciativa en Ginebra.
Proyecto piloto de dos años
El proyecto piloto de dos años implica la evaluación de la insulina desarrollada por los fabricantes para garantizar su calidad, seguridad, eficacia y asequibilidad.
Suponiendo que haya suficiente interés por parte de los fabricantes y, crucialmente, más insulina disponible para los diabéticos, el esquema podría ampliarse posteriormente.
"Vamos a ver la cantidad de compañías que postulan, vamos a ver cuánto tiempo se tarda, vamos a ver los resultados y vamos a ver si esto tiene sentido y si realmente está aumentando el acceso" a la insulina, dijo Cooke, quien adelantó que varias compañías farmacéuticas ya han mostrado su interés en producir insulina y que la Organización evaluara si es seguro para las personas usarla.
El procedimiento para la producción de este tipo de medicamentos genéricos se conoce como precalificación y la Organización Mundial de la Salud lo ha puesto en marcha con éxito en el pasado para vacunas sin marca, incluidas las utilizadas para tratar la tuberculosis, la malaria y el VIH. Por ejemplo, el 80% de los pacientes con VIH ahora dependen de productos genéricos, lo que ha permitido a millones de personas ahorrar mucho dinero, dijo Cooke.
Cuánto puede abaratarse
"Cuando se produjeron por primera vez los antirretrovirales (VIH), el costo por paciente por año fue de 10.000 dólares", dijo. "Una vez que abrimos la precalificación para productos genéricos contra el VIH, el precio bajó a 300 dólares por año".
Cooke agregó: "también estamos seguros de que la competencia bajará los precios. De esa manera, los países tendrán una mayor variedad de productos que son más asequibles ".
De hecho, señaló que algunas compañías ya se habían comprometido a bajar los precios.
La cuadruplicación en el número de personas con diabetes desde 1980, a alrededor de 420 millones en la actualidad, principalmente en países de ingresos bajos y medios, se atribuye ampliamente a una dieta deficiente y a la falta de ejercicio.
El lanzamiento del proyecto se produce en vísperas del Día Mundial de la Diabetes, que se celebra cada 14 de noviembre. En un mensaje con motivo de este Día, el Secretario General de la ONU, António Guterres, destaca el impacto catastrófico de los gastos médicos en los pacientes.
“La diabetes daña la salud y trunca las aspiraciones educativas y laborales de muchas personas, afecta a las comunidades e impone a las familias dificultades económicas porque conlleva gastos médicos exorbitantes”.
Evitar muertes prematuras
Y aunque la diabetes fue la séptima causa de muerte a nivel mundial en 2016, la enfermedad es preocupante porque mata prematuramente, explicó la doctora Gojka Roglic, experta en diabetes.
"Todos tenemos que morir de algo y por qué no de diabetes, pero solo después de celebrar nuestro 90 cumpleaños", bromeó. "El problema con la diabetes es que representa una gran proporción de muertes prematuras, casi la mitad de esas muertes ocurren antes de cumplir los 70 años".
En los países de ingresos bajos y medios, el porcentaje aumenta a alrededor del 60%, agregó Roglic.
Los datos recopilados por la OMS en 24 países de cuatro continentes mostraron que la insulina solo estaba disponible en el 61% de los centros de salud.