Fundación FEMSA y Fondo Procuenca Valle de Bravo realizaron esta acción que beneficia a más de 600 familias en 31 comunidades de la región.
Ambas organizaciones trabajan desde 2008 en la cuenca Valle de Bravo-Amanalco para mejorar la calidad de vida de sus habitantes de manera sostenible.
Ciudad de México.- Fundación FEMSA y Fondo Procuenca Valle de Bravo dan a conocer, en el marco del Día Mundial del Retrete, que han beneficiado a más de 600 familias en 31 comunidades de la región Valle de Bravo-Amanalco con la instalación baños secos. Esta acción ha permitido que sus habitantes mejoren su calidad de vida y prevenir la contaminación de fuentes de agua cercanas.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, seis de cada diez personas en el mundo carecen de saneamiento seguro. Esto significa que 4,500 millones de personas tienen altas probabilidades de adquirir enfermedades como la diarrea, lo cual impacta de manera negativa en la salud al mermar la concentración, aumentar el agotamiento y disminuir la productividad.
Una solución a esta realidad es la instalación de baños secos, tecnología que permite tratar las heces y transformarlas en composta de manera efectiva, económica y segura, además de prevenir la contaminación del agua. “Queremos que cada vez más personas tengan acceso a agua segura y servicios de saneamiento. Por ello seguiremos impulsando el desarrollo de las comunidades al fomentar cambios de comportamiento en sus habitantes para que mejoren su calidad de vida de manera sostenible”, dijo Carlos Hurtado, gerente de Desarrollo Sostenible de Fundación FEMSA.
Uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por la ONU para 2030 es “garantizar la disponibilidad de agua, su gestión sostenible y el saneamiento para todos”.
Por ello, Fundación FEMSA se suma al Día Mundial del Retrete para concientizar sobre la necesidad urgente de llevar acceso a saneamiento mejorado a la población en general.
Fundación FEMSA y Fondo Procuenca Valle de Bravo trabajan desde 2008 en la cuenca Valle de Bravo-Amanalco para construir, junto con los habitantes de las comunidades, ecotecnias como baños secos, cosechas de agua de lluvia que brindan acceso a agua segura, así como fogones ahorradores que reducen el consumo de leña en un 50%. Estas tecnologías ofrecen soluciones integrales a necesidades de las comunidades y promueven la sostenibilidad de los recursos naturales.