La agencia de la ONU para la salud llama a los jóvenes a no caer en los engaños de la industria tabacalera
Naciones Unidas.- Los productos de tabaco causan la muerte de ocho millones de personas anualmente y muchas de esas víctimas se iniciaron en su consumo seducidas por las campañas publicitarias y las estrategias de mercado de la industria, advirte la Organización Mundial de la Salud con motivo del Día Mundial sin Tabaco, a celebrarse el 31 de mayo.
Las tabacaleras gastan 9000 millones de dólares en mercadotecnia cada año para enganchar a nuevos consumidores, principalmente jóvenes. Los datos indican que la mayor parte de los fumadores adquirió ese hábito antes de cumplir 18 años.
La Organización señaló que aún en medio de la pandemia de COVID-19, los productores de tabaco continúan promoviendo sus productos, cuyo efecto en la salud limita la capacidad del cuerpo humano para vencer y recuperarse de la enfermedad provocada por el coronavirus.
Fumar sofoca los pulmones y otros órganos, privándolos del oxígeno que necesitan para funcionar adecuadamente, alertó la agencia mundial de salud.
Resistir la manipulación
En esta ocasión, la Organización Panamericana de las Salud dedica el Día Mundial sin Tabaco a llamar a los jóvenes de América a reconocer, denunciar y resistir las tácticas engañosas que utiliza la industria tabacalera para atraerlos y atraparlos en el consumo de sus productos.
Con frecuencia, el consumo de los productos con tabaco resulta en una adicción a la nicotina que los convierte en consumidores a largo plazo.
“Esto crea la oportunidad de reemplazar a los ocho millones de personas que mueren en el mundo cada año por causas relacionadas con el tabaco. Es una cuestión de rentabilidad a costa de la gente, una elección indefendible”, enfatizó el subdirector de la OPS, Jarbas Barbosa.
La publicidad más agresiva de los productos de tabaco, de los cigarrillos electrónicos y de otras industrias relacionadas en muchos casos está dirigida a los niños y jóvenes, un segmento de mercado muy importantes para el sector. De acuerdo con la OMS, más de 40 millones de adolescentes entre 13 y 15 años de todo el mundo ya han comenzado a consumir tabaco.
Su director de Promoción de la Salud, Ruediger Krech, subrayó la importancia de educar a la juventud: “Queremos que los jóvenes tengan información para que se pronuncien contra la manipulación de la industria tabacalera”.
En línea con esto, la Organización Panamericana de la Salud busca desacreditar los mitos y exponer las tácticas de las que se valen las tabacaleras y sus aliados para atrapar nuevos consumidores.
Todos tenemos un papel
El subdirector del organismo regional instó a toda la población a educarse y ayudar a lograr la generación libre de tabaco.
“Cada uno de nosotros tiene un papel fundamental que desempeñar”, afirmó Barbosa y añadió que todos los sectores pueden ayudar a detener las tácticas de mercado de las tabacaleras dirigidas a los niños y jóvenes.
Para empezar, las escuelas deben rechazar cualquier forma de patrocinio y prohibir que los representantes de las compañías de tabaco y nicotina se relaciones con los estudiantes.
Además, las celebridades y personalidades con influencia tendrían que rechazar todas las formas de patrocinio y la televisión y las plataformas audiovisuales no deberían mostrar el consumo de productos de tabaco o cigarrillos electrónicos en la pantalla.
Del mismo modo, las redes sociales deberían prohibir el mercadeo de tabaco y productos relacionados y los gobiernos e instituciones financieras tendrían que evitar las inversiones en esa industria.
El Convenio Marco para el Control del Tabaco proporciona orientación a los gobiernos sobre las medidas que pueden tomar para reducir el consumo de tabaco y salvar vidas.