La composición de la obra fue comisionada a Jenkins en el año 2000
Monterrey, México, UDEM.- La espiritualidad de los cantos sagrados mezclados con ritmos de marchas belicistas, ejecutados por alrededor de 200 menores en escena, hizo vibrar la sala del Teatro UDEM con la presentación de la Orquesta y Coro Esperanza Azteca, acompañados por el Coro de la Arquidiócesis de Monterrey.
Dentro de la Semana Cultural de la Universidad de Monterrey, se ejecutó el concierto sinfónico The armed man: a mass for peace, del compositor galés Karl Jenkins, una obra que invita a la reflexión sobre los horrores de la guerra y la forma en que debe cultivarse la paz.
La pieza sinfónica, integrada por expresiones corales segmentos a capela y en otros momentos en canon, está compuesta por 13 secciones y se basa en textos de escritores y de escritos sagrados, no solo cristianos y católicos, sino de otras religiones.
Bajo la batuta de Óscar Serna y la participación de más de 200 jóvenes de escasos recursos −congregados alrededor de la música mediante el proyecto artístico social Esperanza Azteca−, el concierto se acompañó también por imágenes de la guerra: enfrentamientos con la población, tanques de guerra, helicópteros, bombas, proyectadas al fondo del escenario.
La composición de la obra fue comisionada a Jenkins en el año 2000 para la celebración del cambio de milenio, y con ocasión del traslado del Royal Armouries Museum de Londres a la ciudad de Leeds, y es una pieza anti-guerra dedicada a las víctimas de la crisis de Kosovo.