Por Jesús Oscar González Medina/ Agencia de Noticias 3er Sector
Monterrey,México. La crisis de confianza de los ciudadanos en los medios tradicionales, será aprovechada por los actores políticos durante el proceso electoral para elegir al Presidente del país, con la difusión de falsas noticias –“Fake News”- en las redes sociales para desinformar con el propósito de impactar en la opinión pública de más de 70 millones de usuarios, generando confusión, pánico y psicosis colectiva.
De acuerdo a un estudio sobre los Hábitos de los Internautas en México de la Asociación de Internet.mx, nueve de cada 10 usuarios mexicanos de redes sociales, están interesados en la evolución del proceso electoral de 2018; seis de cada 10 consideran que internet los acerca a los procesos democráticos y se informarán acerca de las propuestas de campaña, los actores políticos, los casos de corrupción y la transparencia de los candidatos en redes sociales y portales de noticias.
En las redes sociales es donde se harán las campañas de manipulación política o guerra sucia, aprovechando que no existen los controles de la autoridad electoral, solo los medios de comunicación tradicionales (televisión y radio) están impedidos por ley a publicitar contenidos electorales, el Instituto Nacional Electoral es el único autorizado para manejar la propaganda política.
Por esta razón, los candidatos a la presidencia de México: Andrés Manuel López Obrador, Ricardo Anaya Cortés, José Antonio Meade, y los precandidatos, Jaime Rodríguez Calderón y Margarita Zavala, utilizan las redes sociales para comunicar sobre sus actividades a sus simpatizantes, y de paso criticar a sus adversarios, así como descalificar a los medios de comunicación tradicionales.
Los aspirantes a la Silla Presidencial, han invertido recursos financieros para hacerse de una base social de usuarios en las redes sociales. Por ejemplo el precandidato independiente, Jaime Rodríguez “El Bronco”, tiene en su cuenta de facebook a un millón 596 mil 223 seguidores; Ricardo Anaya Cortés, de la coalición “Por México al frente”, lo siguen un millón 074 mil 251 de personas; José Antonio Meade, de la coalición “Todos por México” cuenta apenas con 366 mil 297 seguidores; Margarita Zavala, precandidata independiente tiene en su cuenta a 589 mil 153 personas y finalmente Andrés Manuel López Obrador, de la coalición “Juntos Haremos Historia” con 18 años de campaña en pos de la Presidencia de la República, tiene en su cuenta a 2 millones 600 mil seguidores.
El analfabetismo digital y la manipulación política
Alvaro Rattinger, Ceo de la Revista Merca 2.0, señala que el fenómeno de las fake news, conocidas también como las falsas noticias, es mucho más que una noticia errónea que suele circular en internet, busca desinformar, confundir hasta reemplazar hechos, se dan en forma de memes, artículos, videos, citas o piezas de información editorial.
Entre más medios hay para comunicar, más grave se hace el problema, la psicosis colectiva hace que compartamos cosas sin mayor comprobación, también hace que nuestro sentido común y capacidad de observación desaparezcan. Si los usuarios o medios pueden crear verdades a la medida, conceptuales o post evento, tenemos un problema grave de credibilidad, aseguró.
Cada mensaje es tan dirigido que es casi imposible detectar que se trata de una manipulación ya que sólo el interesado lo ve. Es una suerte de corrección de percepciones en la que una persona dice algo en público y después cambia la versión en un espacio más privado, afirmó.
No obstante, el consumidor ve las recomendaciones de evitar compartir contenido como un asalto a su libertad de expresión y un ataque a la transparencia. Compartir en redes sociales se ha vuelto la defensa de los habitantes a gobiernos corruptos y opresores. Sin embargo, también podría significar la destrucción de la democracia misma, al compartir contenido no verificado o tendencioso podríamos ser parte del juego de personas con motivos no muy saludables para el interés público, aseguró, Rattinger.
Por su parte, el periodista español Alex Grijalmo, manifesta que la era de la posverdad, es en realidad la era del engaño y de la mentira, pero la novedad que se asocia a ese neologismo consiste en la masificación de las creencias falsas y en la facilidad para que los bulos prosperen.
La mentira debe tener un alto porcentaje de verdad para resultar más creíble. Y mayor eficacia alcanzará aún la mentira que esté compuesta al cien por cien por una verdad.
Hoy en día todo es verificable, y por tanto no resulta fácil mentir. Sin embargo, esa dificultad se puede superar con dos elementos básicos: la insistencia en la aseveración falsa, pese a los desmentidos fiables; y la descalificación de quienes la contradicen.
Grijalmo, añade que a ello se une un tercer factor: millones de personas han prescindido de los intermediarios de garantías (previamente desprestigiados por los engañadores) y no se informan por los medios de comunicación rigurosos, sino directamente en las fuentes manipuladoras (ciberpáginas afines y determinados perfiles en redes sociales). Se conforma así la era de la posmentira.
Usuarios de las redes sociales desconocen que interactúan con Bots y no con personas reales
Aprovechando el analfabetismo digital de millones de usuarios, los partidos políticos, aspirantes a puestos de elección popular, líderes sociales y activistas, entre otros, contratan cuentas automatizadas conocidas como bots –cuentas falsas-, administradas por algoritmos programados que interactúan con los usuarios como si fueran personas reales.
Por tal motivo se observa que algunos candidatos a la presidencia tienen en sus cuentas de redes sociales a millones de seguidores, muchos de ellos comprados, para aparentar la simpatía que les tienen en las redes sociales y otros son “bots” que lo defenderán de las críticas de personas o sus adversarios.
Un estudio de la Universidad del Sur de California, revela que 15 por ciento de las cuentas de Twitter son bots. Esto significa que 48 millones de cuentas en la red son falsas. Mientras que el diario The New York Times, exhibió a una empresa llamada Devumi que ha usado 3.5 millones de cuentas automatizadas o bots, cada una revendida, para proporcionar más de 200 millones de seguidores en Twitter.
Por otro lado, la Universidad de Washington anunció sobre un sistema inteligencia artificial capaz de crear un video de una persona hablando a partir de clips anteriores. En esencia es posible poner palabras en la boca de cualquier persona y subir a internet.
Exhortan a la clase política no promover un clima de violencia de no ser favorecidos con el voto
Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), declaró que en los últimos días, simpatizantes de algunos candidatos se han pronunciado por la violencia en caso de no resultar favorecidos y el clima de denostación se ha incrementado, no lo podemos permitir, México merece mucho más.
En el sector privado, nos parece inadmisible que se promueva una actitud de desconfianza y, mucho menos, que se fomente el uso de la fuerza. La voluntad de los ciudadanos es inapelable, tanto como el respeto a la Ley y sus instituciones es imprescindible.
Agregó que es momento de que la clase política vea más allá de sus aspiraciones personales y políticas. Caer en la lógica de que “el fin justifica los medios” no sólo lastima el proceso electoral, sino que pone en riesgo la estabilidad del país, y el ánimo de las personas. Sean quien sean los candidatos ganadores el próximo 1 de julio, tendrán que gobernar en favor de todos los mexicanos, no sólo de sus propios simpatizantes.
A los candidatos, tanto de partidos políticos como los independientes en su momento, les exigimos compromiso y responsabilidad con México. Que busquen el apoyo del electorado con base en sus plataformas políticas, con propuestas sólidas, argumentadas y viables; no solo con slóganes vacíos. Necesitamos contenido en México, concluyó.
Periodistas españoles recomiendan como combatir las noticias falsas
Periodistas y expertos debatieron sobre cómo combatir las fake news o noticias falsas en la era de la posverdad, durante la XX Edición del Laboratorio de Periodismo de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM).
Y proponen que en la era de la posverdad, y ante la pérdida de credibilidad que se viene registrando, los medios de comunicación deben redoblar el esfuerzo en cumplir con las clásicas reglas de la profesión periodística: ética, rigor, comprobación, incluir la mayor cantidad de fuentes y datos que sea posible.
Dada la proliferación de noticias falsas, se debe verificar los hechos y no compartir la información y para combatir las mentiras que se propagan a través de la red, hay que viralizar los desmentidos con la misma efectividad.
Emplear herramientas gratuitas en internet para verificar la autenticidad de los datos (búsquedas avanzadas en Google, First Draft News, Hoaxy…) y de las imágenes (Google Search by Image, TinEye, FotoForensics…) que los periodistas deben dominar, además de conocer sitios especializados en difundir contenidos sobre noticias falsas.
Ante la actual sobreinformación, se hacen aún más necesarios periodistas experimentados, cualificados y con una gran preparación, además de un constante reciclaje.
Al ver los desmentidos, los usuarios deben poder comprobar por sí mismos que esa es la realidad, y no el bulo inicial. Asimismo, deben conformar una comunidad que ratifique cuál es la verdad y ayude a propagarla.
Finalmente consideran que es fundamental promover un espíritu crítico ante la lectura de noticias para evitar la circulación masiva de bulos: comprobar si el medio de comunicación emisor y el autor son confiables, tener presentes los posibles sesgos, examinar las fuentes de la supuesta noticia.