La regulación financiera, enfocada en sostenibilidad, también juega un papel vital. México
Por Luis Battilana, Country Manager de Baufest México y director general de Servicios para la Industria Financiera de Baufest Latam
Monterrey, México, Agencia de Noticias 3er Sector, Opinión Invitada.- La Organización de las Naciones Unidas (ONU) recientemente declaró el fin del calentamiento global e inicio de la "ebullición mundial", subrayando la urgencia de intensificar los esfuerzos hacia la sostenibilidad en todas las esferas industriales. Las instituciones financieras latinoamericanas, en este escenario, tienen un papel crucial. Es esencial que prioricen la protección medioambiental y las iniciativas contra el cambio climático.
Es alentador observar que, en 2022, un 80% de los países latinoamericanos reforzaron sus compromisos bajo el Acuerdo Climático de París para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Tomando como ejemplo a México, este ha elevado su objetivo de reducción del 22% al 35% para 2030. Esta meta refleja la significativa responsabilidad que tiene el país para proteger su biodiversidad, ecosistemas y recursos, fundamentales para el cambio hacia una matriz energética global más limpia.
No obstante, construir una economía sostenible que beneficie a la sociedad, ofreciendo nuevas alternativas de financiamiento y capital, requiere que las instituciones financieras se posicionen al frente de la lucha contra el cambio climático. El sector financiero tiene el potencial de canalizar inversiones hacia la adaptación climática, la mitigación y la conservación de la biodiversidad, transformando los riesgos relacionados con el clima en oportunidades de inversión.
Es esencial respaldar iniciativas como la Red para un Sistema Financiero más Ecológico, establecida por varios bancos centrales y supervisores regionales. Esta red promueve el intercambio de prácticas líderes en la gestión del riesgo climático y combate el "lavado verde" - prácticas que solo pretenden ser ecológicas sin serlo realmente.
La regulación financiera, enfocada en sostenibilidad, también juega un papel vital. México, por ejemplo, ha avanzado en esta dirección con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) estableciendo requisitos claros en torno a criterios ASG (ambientales, sociales y de gobernanza).
Acentuar programas y compromisos ambientales en las instituciones financieras es igualmente crucial. Según el McKinsey Global Institute (MGI), instituciones vinculadas a la Net-Zero Banking Alliance (NZBA) han establecido metas de emisión cero para 2050 y objetivos sustanciales de descarbonización para 2030.
El impacto económico de la sostenibilidad es palpable: la emisión de bonos verdes ha crecido exponencialmente, reflejando un incremento de 13,600 millones de dólares en 2019 a 30,200 millones en 2021, según la Iniciativa de Bonos Climáticos. Sin embargo, es vital que estas instituciones fortalezcan sus habilidades y conocimientos para medir emisiones y alcanzar sus metas. Esto exige estrategias adaptadas a las prioridades ambientales de cada país.
Ahora bien, para que el sector financiero pueda cumplir con sus compromisos ambientales es clave que se apoye en innovadoras tecnologías, como la solución Microsoft Sustainability Manager, que permite a las instituciones bancarias tener completa visibilidad de sus actividades de emisiones, al registrar, informar y reducir de manera más eficiente: desperdicios de agua, la contaminación ambiental y los problemas en manejo de desechos.
Contar con información precisa sobre los impactos actuales que generan las instituciones financieras es de vital importancia, porque permite tomar decisiones certeras y construir estrategias enfocadas a reducir su huella climática, al mismo tiempo que cumplen con las normativas medioambientales vigentes.
Hoy las instituciones financieras de América Latina tienen ante sí la posibilidad de ser pioneras globales en gestión medioambiental y en la implementación de prácticas líderes. Pero esto exige una estrategia de sostenibilidad integrada y coordinada en todas sus áreas.
En Baufest ayudamos a las empresas del sector financiero a crear soluciones tecnológicas que les permitan lograr sus metas ambientales; los acompañamos en el análisis de grandes volúmenes de datos para predecir fallos y anticipar demanda; y los impulsamos para transformarse culturalmente y así lograr agilidad en los procesos de negocio y por ende reducciones en los recursos que se emplean.
Aunque la adopción de sostenibilidad ha sido gradual en las instituciones financieras latinoamericanas, confío en que, con la ayuda de la tecnología, estos entes redoblarán sus esfuerzos para priorizar la protección medioambiental, contribuyendo a un futuro más verde y sostenible.