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Muestra UANL sus avances y proyectos de acceso abierto

Desarrollo
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La UANL fue sede de las “Jornadas de Ciencia Abierta y Propiedad Intelectual en la Era Digital”

Se mostraron los repositorios, colecciones y proyectos hemerográficos de libros, revistas y recursos digitales

Por Luis Salazar/Fotógrafo: Daniel Zamora

Monterrey, México, UANL.- Desde las declaraciones de Budapest y Berlín, la UANL mantiene un compromiso con el acceso abierto a su producción científica, literaria, artística y de sus acervos. Sus repositorios, bases de datos y proyectos son una muestra de ello.

 

Ese fue el tema principal de la conferencia “Acceso abierto en la UANL”, que impartió el coordinador de sistemas para bibliotecas de la Dirección de Tecnologías de la Información de la UANL, Dagoberto Salas Zendejo.

Esto ocurrió en las “Jornadas de Ciencia Abierta y propiedad Intelectual en la Era Digital”, realizadas el 15 de agosto en la Biblioteca Universitaria “Raúl Rangel Frías”. Algunos de los acervos y proyectos fueron enumerados por el bibliotecólogo.

Repositorio Académico Digital UANL

Alberga 12 mil 613 elementos.

Se han registrado 8 millones 807 mil 251 descargas.

Contiene 7 mil 965 tesis, 3 mil 841 artículos, 265 secciones de libros, 233 conferencias o artículos de un taller, 16 libros y otros recursos.

Colección Digital UANL

Administrado por la Dirección de Bibliotecas desde 2004.

Alberga 15 mil 489 elementos en tres colecciones principales: 5 mil 843 tesis, mil 437 documentos del Fondo Universitario y 8 mil 209 libros antiguos.

Hay documentos editados durante los siglos XVI al XIX en español, italiano, francés y latín.

Hemerografía Capilla Alfonsina UANL

Colección de publicaciones periódicas de relevancia histórica.

Semanario Gráfico y de Actualidades ZigZag, que se editó de 1909 a 1914.

La meta es publicar más de mil títulos y 19 mil 720 fascículos de publicaciones periódicas.

Otro de los proyectos que buscan en materia de ciencia abierta es imitar el proyecto BiblioHack, original de los argentinos Matías Butelman y Juan Pablo Suárez, en el que desarrollan escáneres económicos y fomentan una red colaborativa entre las instituciones encargadas de preservar el patrimonio cultural.

En tanto, los recursos de información académica, científica, tecnológica y de innovación (RIACTI) se especializa en educación a distancia. Contiene investigaciones y objetos de aprendizaje, cursos abiertos, tesis, ponencias en congresos arbitrados. Es creado por la Dirección de Educación Digital con apoyo del Conacyt en 2017.

Además de los acervos y bases de datos tangibles, está el proyecto Editorial Digital, integrado por la Revistas UANL y Libros UANL, donde el plan es apoyar, soportar y capacitar a las revistas en su transición del papel a la forma digital.

Revistas UANL es un catálogo con más de 50 revistas que se publican al interior de la UANL y es impulsado por la Dirección de Tecnologías de Información desde 2017.

Libros UANL conservará el acervo de la producción que se hace en la Editorial Universitaria y el Centro Regional de Información de Historia Regional, incluirá libros de narrativa, historia, novela, cuento, académicos.

El Portal de Recursos Digitales albergará toda la producción de la Institución que esté en Open Acces, y utiliza el protocolo Open Archive Initiative-Protocol for Metadata Harvesting (OAI-PMH) para “cosechar” recursos.

Finalmente, ALERE es la plataforma digital que pone a disposición de la comunidad información especializada sobre temas de actualidad de manera gratuita.

Contiene temas variados y cuenta con subtítulos, doblaje de voz, cuestionarios interactivos, videoconferencias en tiempo real, adaptabilidad a smartphones.

Además, hay proyectos pendientes como lo es “Ciencia Abierta y Gestión de Datos de Investigación (Research Data Managment)” y el “Proyecto de Datos abiertos (Open Data)”.

Numeralia del Repositorio Nacional

El Coordinador de Producción Científica del Conacyt, Julio César Trujillo, impartió la conferencia “Ciencia Abierta y el Repositorio Nacional en México”, en donde explicó que inició en 2016 y ahí residen otros repositorios institucionales como el de la UANL.

Está integrado por 102 repositorios institucionales.

Tiene 84 mil 181 recursos de información.

Cuenta con 6 millones 74 mil 168 descargas.

Son 19 mil 844 bases de datos.

18 mil 359 tesis de maestría.

16 mil 913 artículos.

5 mil 239 tesis de doctorado.

3 mil cinco capítulos de libros.

1,955 libros.

Trujillo mencionó que el 75 por ciento de las consultas provienen de alguno de los 6 mil 200 usuarios de México; un 8.57 por ciento de los 702 usuarios del Perú; un 4.51 por ciento de de Estados Unidos; y hay 186 usuarios de Colombia que representan el 2.27 por ciento de las descargas.

Patentes, derechos de autor y Creative Commons

La bibliotecóloga Zaira Lagunas Ledesma, trabajadora de la Coordinación de Sistemas de Información de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, presentó la ponencia “Propiedad intelectual y acceso abierto”.

Lagunas recordó que, en 2018, los principales titulares de patentes en México fueron la UNAM con 44; el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del IPN (Cinvestav) con 38; y en tercer lugar hay un empate con 23 patentes entre la UANL y el IPN.

Expuso el tema de lo que reconoce y lo que no reconoce como obra intelectual la Ley Federal de Autores. Ejemplificó que el derecho patrimonial de un autor tiene una vigencia de la vida del autor y, a partir de su muerte, 100 años más. Si existen coautores de la obra, los 100 años se contarán a partir de la muerte del último.

En su charla, la bibliotecóloga enfatizó buscar la licencia de los [bienes] Comunes Creativos, (Creative Commons CC, como se conocen a nivel internacional), que es una organización sin fines de lucro y desarrolla un conjunto de instrumentos jurídicos de carácter gratuito dedicados a promover el acceso y el intercambio de cultura con el objetivo de facilitar, usar y compartir la creatividad y el conocimiento.​

Lagunas considera que los Creative Commons aportan ventajas, ya que no son una alternativa al derecho de autor sino un derecho de autor per se, pero simplificado y no burocrático. 

Tienen una economía en los procesos para el reconocimiento de la autoría de las obras disponibles en ambientes digitales e incrementan la visibilidad, difusión e impacto de la producción científica.