Realizan el Congreso de Trastornos de la Conducta Alimentaria
Monterrey, México, UDEM.- De acuerdo con el psiquiatra Andrés Treviño Álvarez, un problema de salud mental puede alterar el metabolismo y, a su vez, el metabolismo alterado puede impactar en la salud mental en personas con trastornos de conducta alimentaria.
"Diferentes artículos señalan cómo las y los pacientes pueden presentar alteraciones neurobiológicas, que hacen que esta conducta de alimentación se asemeje a la conducta de alguien que presenta un problema de adicciones”, advirtió.
Treviño Álvarez participó este miércoles en el Congreso de Trastornos de la Conducta Alimentaria, organizado por la Sociedad de Alumnos de las Carreras Asociadas a Psicología (SACALPS) de la UDEM, que se desarrolla el 1 2 de marzo, en el edificio Estoa de la Universidad de Monterrey, aunque su conferencia Nutrición y neuroquímica, fue la única en formato virtual.
El psicoterapeuta recomendó a estudiantes de programas académicos de Nutrición, Psicología y Médico Cirujano y Partero a trabajar en equipo a través de referencias, a evaluar respuestas a restricciones en las dietas, tener psicoterapia especializada y atención con especialistas médicos, aunque no hay una “solución mágica”.
“No hay una terapia ni un medicamento que lo arregle todo, de tal manera que es necesario personalizar y hacer una muy buena evaluación: diagnóstico específico, tratamiento específico”, indicó.
Treviño Álvarez exhortó a elaborar metas personalizadas para cada paciente, escuchar lo que ellos y ellas necesitan y llegar a “puntos medios”, de acuerdo a cada caso.
“Cuando se encuentren con alguien con trastornos de la conducta alimentaria, practiquen una postura muy empática, de compasión, con un deseo de que la persona deje de estar sufriendo e identifiquen, sin juicios, qué está sucediendo, observen las conductas, pregunten”, destacó el médico.
Treviño Álvarez destacó la necesidad de trabajar en equipo y que, por ejemplo, las y los nutriólogos busquen especialistas en psicoterapia, que tengan la consideración de evaluar la organización de personalidad o ver si sus pacientes están presentando disregulación emocional.
“Será importante que evalúen cómo están respondiendo sus pacientes a las restricciones; hay factores de riesgo que llevan más fácilmente a los atracones, puede ser una situación afectiva o una emocional”, apuntó.
Pero, por otra parte, dietas restrictivas como ayunos para estos pacientes suelen tener muy mala respuesta, “porque la restricción aumenta el riesgo del ‘atracón’ y vuelve a arrancar el ciclo”.
Para el psiquiatra, los tres pilares para la atención a las personas con trastornos de conducta alimentaria son la dieta, el ejercicio y el sueño.
