Orillados a tomar clases en casa por la pandemia, los niños han perdido movilidad y los hábitos alimenticios sanos. Este descuido ha elevado los casos de obesidad y sobrepeso. La nutrióloga Mayra Cañamar exhorta a los padres de familia a tomar cartas en el asunto y planificar la alimentación de los pequeños.
Por: Norberto Coronado Fotografía: José Luis Macías
Monterrey, México. (puntou.uanl.mx). - En México, según datos de la UNICEF, uno de cada tres niños padece obesidad y sobrepeso, situación que parece agravarse al estar los menores en casa sin un control alimenticio a raíz de la pandemia generada por el COVID-19.
Para la nutrióloga Mayra Cañamar Ramírez, una de las formas de comenzar a modificar este escenario es establecer horarios específicos para las comidas y acogerse a una planificación sobre los alimentos que serán parte del menú de los niños.
“Creo que fue principalmente el cambio de rutinas. Pasamos de una vida activa a un modo sedentario. El estar en la casa cambió también los hábitos de alimentación, el no llevar una rutina o un horario establecido en las comidas y el que los niños estén en sus clases de manera virtual nos movió a todos”, puntualiza la egresada de la Facultad de Salud Pública y Nutrición de la UANL.
Para este inicio de ciclo escolar 2021, los tutores o padres de familia tienen la oportunidad de planificar el menú de los pequeños ya que, pasado el tiempo, los malos hábitos pueden afectar su salud.
Cañamar Ramírez, quien es encargada del departamento de nutrición deportiva de la Dirección de Deportes de la UANL, comenta que del estilo de vida de cada familia depende la forma de organizar su alimentación y su actividad física, que son fundamentales en la salud de los pequeños.
“Debe tenerse un horario establecido para al menos los tres tiempos de las comidas (desayuno, comida y cena), y si se quiere incluir algún tipo de snack para los niños, buscar opciones que sean saludables”. Mayra Alejandra Cañamar Ramírez, Nutrióloga de la Dirección de Deportes de la UANL.
Mejorar los hábitos alimenticios
La especialista pone especial énfasis en mantener hidratados a los niños con agua natural, evitar la comida chatarra, así como los alimentos con alto contenido de azúcares y grasas saturadas.
“Deben consumirse alimentos cuando se tenga apetito y si se carece de él hay que evaluarlo. Los horarios ayudan a detectar esto. Pero, sobre todo, los alimentos deben incluir frutas, verduras, todo lo que aporte para su óptima nutrición”, aconseja.
La nutrióloga, quien está certificada por la Sociedad Internacional para el Avance de la Cineantropometría, menciona que, aunque se da por hecho que la sociedad sabe que el comer en exceso tiene efectos negativos, es buen momento para integrar a la dieta diaria alimentos que ayuden a reforzar el sistema inmune por su aportación de vitaminas y minerales.
La Secretaría de Salud estima que el costo total de la obesidad en el país durante 2017 fue de 240 mil millones de pesos y seguirá aumentando hasta alcanzar los 272 mil millones en 2023.
Acercarse a los expertos
Mayra Cañamar Ramírez sugiere que los padres de familia pidan orientación profesional en temas de salud, ya que esto les traerá múltiples beneficios, no solo en cuestión de salud, sino económicos.
“El principal problema de seguir con hábitos de alimentación negativos, como no comer suficiente o el exceso de esto, puede tener como consecuencias la irritabilidad, el cansancio, el aumento de la grasa corporal, la desnutrición, el estrés, los cuales pueden desencadenar enfermedades como la obesidad o la diabetes”, asegura.
“Si la situación sigue así (confinamiento) podemos corregir el tipo de alimentación que estamos llevando, pero lo ideal sería acercarse a los expertos en temas de nutrición. Asimismo, es pertinente practicar alguna actividad física, que es clave para lograr una buena salud, entre otros hábitos que pueden ir mejorando, como el dormir”. Mayra Alejandra Cañamar Ramírez.
Tips para mantener la salud de los niños en casa
- Establecer horarios de comida fijos.
- Optar por botanas saludables, de preferencia que puedan prepararlas los niños.
- Elijan juntos padres e hijos un tutorial de receta tomando en cuenta el valor nutricional de los ingredientes.
- Cumplir los ejercicios del programa Escuela en Casa.
- Tener en familia una rutina de ejercicio.
- En lo posible, realizar actividades recreativas al aire libre.
