Con información de Elvia Ochoa Gaona/Agencia de Noticias 3er SECTOR
Ciudad de México.- Un EcoLápiz no es un lápiz reciclable, sino uno construido con árboles reforestados. Además, han sido diseñados para que su uso sea más cómodo y duradero, con tecnología antideslizante por fuera y con técnicas patentadas por Faber-Castell para proteger la mina y que no se rompa al sacarle punta ni se quiebre, si se cae.
Todos los EcoLápices de Faber-Castell poseen la certificación FSC (Forest Stewardship Council), la cual refrenda el compromiso de la marca al utilizar madera que proviene de bosques 100% sustentables. Además, la empresa contribuye con los programas "Arboris" y "Animalis", con el objetivo de contribuir a la conservación de la flora y la fauna de la Amazonia en Brasil.
La compañía Faber-Castell, cultiva a diario 20 metros cúbicos de madera por hora, y mantiene sus propias plantaciones de pino, en lo que antes eran pastizales en Brasil. De esos mismos bosques proviene su línea "ECO", productos de madera que por sus características de fabricación, contribuyen a la protección del medio ambiente, al ser producidos con madera 100% reforestada y barniz no tóxico.
Los bosques de Faber-Castell producen tres veces más oxígeno que el CO2 que generan muchas fábricas. Pero no sólo en los bosques, la marca mantiene su compromiso con el medio ambiente, sino también en sus oficinas en Stein, Alemania que utilizan residuos de madera para proveer calefacción a sus instalaciones. Obtiene también el 25% de su electricidad gracias a una turbina de agua. A nivel general, el 80% de la energía y procesos que utiliza la compañía, provienen de fuentes renovables.
Los EcoLápices de Faber-Castell, que forman parte de su línea Playing & Learning se encuentran disponibles en distintas formas como Jumbo, Hexagonal, bicolor, acuarelables y grip. Toda la gama los acompañará durante las distintas etapas y necesidades de los niños, y en este Día del Niño pueden ser un gran regalo.