Tan sólo en 2022, este modelo recaudó casi 198,000 kilogramos de residuos
Monterrey, México (Agencia de Noticias 3er Sector).- Ecomunidad es un claro ejemplo que ayuda a las personas a tener un consumo responsable para construir un mundo mejor y sostenible para todos.
Blanca Cantú vive en la colonia Mariano Escobedo de Monterrey, Nuevo León y, a pesar de vivir a menos de un kilómetro de Cemex Planta Monterrey fue en el momento en que estuvo presente en una plática con personas que trabajan en la empresa que se enteró de Ecomunidad.
Sin pensarlo dos veces, cuando el programa que promueve la circularidad se acercó a su comunidad comenzó a guardar desechos como los plásticos que se generan en su hogar: botellas PET y de productos para el cuidado del hogar.
Para Blanca todos estos residuos carecían de valor, pero cuando se enteró que Cemex los podía intercambiar por productos, su percepción cambió sobre los desechos.
Ecomunidad nació en 2019 como un programa escolar; sin embargo, con la llegada de la pandemia en 2020, comenzó a implementarse en comunidades de México y en 2022 el modelo fue replicado en otros países.
Blanca ya sabe cómo separar los residuos para que sean reciclados adecuadamente y formen parte de una economía circular y, además, su colonia es la que más recauda desechos pues familiares y vecinos se han sumado a Ecomunidad porque ven el beneficio en sus bolsillos.
En el caso de Blanca, este programa le ha generado ahorros pues dejó de comprar productos de limpieza que obtiene en el intercambio de residuos del programa.
Entre los objetivos de Ecomunidad destaca concientizar a las personas sobre la sostenibilidad del medio ambiente y el consumo responsable mediante una capacitación con el fin de poner en práctica el reciclaje de todo tipo de residuos plásticos.
Tan sólo en 2022, este modelo recaudó casi 198,000 kilogramos de residuos y benefició a más de 42,000 personas. Entre los desechos que se reciclan destacan el cartón, aluminio y plásticos tipo PET HDPE.
Los residuos que Ecomunidad recolecta y que no pueden reciclarse de manera tradicional son procesados por Regenera, negocio de Cemex que los convierte en combustible alterno utilizado en los hornos para producir cemento.
