Por Jesús Oscar González Medina
Monterrey, México.- (Agencia de Noticias 3er Sector) Fotografía/ cortesía de National Geografic.- La desaparición de los Dinosuarios de la faz de la Tierra hace más de 66 millones de años durante el período Cretácico, considerada por los científicos como la -Quinta Extinción- fue provocada por el impacto de un asteroide en la Península de Yucatán; actualmente expertos en biodiversidad creen que nuestro Planeta está atravesando por una Sexta Extinción Masiva que está siendo provocada por la actividades de los seres humanos.
La teoría del impacto del meteorito con la Tierra “habría tenido consecuencias devastadoras, incluyendo ondas expansivas, incendios forestales a nivel mundial, tsunamis y una lluvia de roca fundida”, dijo Hans-Dieter Sues, paleontólogo en el Museo Nacional de Historia Natural en Washington, D.C. al ser entrevistado por la Revista National Geografic.
"La cantidad adicional de materia en partículas se habría mantenido flotando en la atmósfera durante semanas, meses, quizás años, y el bloqueo de la radiación solar entrante terminaría con la vida vegetal y causaría caídas catastróficas de las temperaturas", añadió Sues.
La organización World Wild Life precisa en un artículo que “una extinción masiva es un breve período de tiempo geológico en el que se extingue un alto porcentaje de la biodiversidad o de distintas especies (bacterias, hongos, plantas, mamíferos, aves, reptiles, anfibios, peces, invertebrados). Bajo esta definición, es importante tener en cuenta que, en el tiempo geológico, un período "corto" puede abarcar miles o incluso millones de años”.
Agrega que la Tierra ha experimentado cinco eventos de extinción masiva, que a diferencia de los eventos anteriores de extinción causados por fenómenos naturales, la Sexta Extinción Masiva está impulsada por la actividad humana, principalmente debido (aunque no limitada) al insostenible uso de la tierra, el uso del agua y la energía, y el cambio climático.
Hoy en día, el 40% de toda la tierra ha sido convertida para la producción de alimentos. La agricultura también es responsable del 90% de la deforestación global y representa el 70% del uso de agua dulce del planeta, alterando de manera importante los hábitats y devastando las especies que viven en esos lugares.
Es evidente que los lugares y las maneras en que se producen los alimentos son una de las mayores amenazas causadas por el hombre en torno a la extinción de especies y nuestros ecosistemas. Para empeorar las cosas, la producción y el consumo de alimentos no sostenibles contribuyen significativamente a las emisiones de gases de efecto invernadero, las cuales están provocando un aumento de la temperatura atmosférica y causando estragos en todo el mundo.
La crisis climática está ocasionando desde sequías más severas hasta tormentas más intensas y frecuentes. También empeora los retos asociados con la producción de alimentos que estresan a las especies y genera las condiciones que hacen que sus hábitats sean inhóspitos.
El aumento de las sequías y las inundaciones ha hecho que sea más difícil mantener los cultivos y producir suficientes alimentos en algunas regiones. Las delicadas relaciones que existen entre el sistema alimentario, el cambio climático y la pérdida de biodiversidad están ejerciendo una enorme presión sobre nuestro planeta.
Las especies no existen en forma aislada; están interconectadas. Una sola especie interactúa con muchas otras especies en formas muy específicas generando beneficios para las personas, como aire limpio, agua limpia y suelos saludables para una producción eficiente de los alimentos. Pero cuando una especie se extingue en un ecosistema o el número de su población disminuye tanto que no puede mantener sus importantes funciones, otras especies se ven afectadas, lo que a su vez afecta la forma en que funciona el ecosistema y los beneficios que brinda. Esto aumenta el potencial de la extinción de las especies.
Actualmente, la tasa de extinción de especies se estima entre 1,000 y 10,000 veces más alta que las tasas de extinción natural, tasa de extinción de especies que ocurriría si los humanos no estuviéramos presentes. Si bien las extinciones son una parte normal y esperada del proceso evolutivo, las tasas actuales de disminución de las poblaciones de especies y extinción de especies son lo suficientemente altas como para amenazar funciones ecológicas importantes que sustentan la vida humana en la Tierra, como un clima estable, patrones regionales predecibles de precipitación o tierras agrícolas productivas y pesquerías.
Si no tomamos el rumbo correcto, continuaremos perdiendo la biodiversidad que sustenta la vida a un ritmo alarmante. Estas pérdidas, en el mejor de los casos, tardarán décadas en revertirse, lo que dará como resultado un planeta menos capaz de sustentar a las generaciones actuales y futuras, advierte el artículo de la organización ambientalista World Wild Life.
¿Qué podemos hacer para detener la extinción masiva?
Se necesitan acciones urgentes si queremos frenar los impactos humanos en la biodiversidad, precisa World Wild Life al proponer los siguientes puntos:
Acuerdo de París. Podemos aumentar nuestros compromisos para reducir las emisiones de carbono en virtud del Acuerdo de París y limitar el calentamiento global a 1.5 grados centígrados.
30X30. Los líderes mundiales pueden apoyar la iniciativa America the Beautiful para conservar el 30% de las tierras y agua de Estados Unidos para el año 2030.
Build Back Better. El Congreso puede apoyar un paquete de políticas que ofrezca la inversión federal más grande en energía limpia.
Cumbre de Biodiversidad de la ONU. El liderazgo de Estados Unidos puede desempeñar un papel fundamental junto con otros 195 países y acordar nuevos y ambiciosos objetivos globales sobre la biodiversidad y cómo se puede lograr el financiamiento y la implementación.
Movimientos sociales. Si bien el gobierno federal puede establecer políticas de alto nivel para conservar la naturaleza, las empresas, las comunidades y las personas tienen un importante papel que desempeñar para cambiar el comportamiento corporativo por medio de sus hábitos de consumo, así como exigir que los líderes políticos rindan cuentas.
Reserva Natural Maderas del Carmen, esfuerzo de biodiversidad de CEMEX
Cristina Goettsch Mittermeier, considerada una de las fotógrafas conservacionistas más influyentes de nuestro tiempo que ha documentado proyectos de conservación y de problemas que existen en el mundo en este tema: “Daba un dato que salta a la vista y que puede tener mucha resonancia; ella mencionó, estamos entrando en la Sexta Extinción Masiva de la historia geológica de nuestro planeta”, señaló Carlos Medina Ayala, director de Sostenibilidad y Agenda 2030 CEMEX México.
Medina Ayala comentó lo anterior en la presentación del libro Rewinding dentro del programa cultural de la 52ª Feria Internacional del Libro 2024 y que corresponde a la 31ª edición de la Colección de Libros de Naturaleza editado por CEMEX.
Es un dato muy duro y muy frío. Cuando escuchamos eso, que estamos en la Sexta Extinción Masiva de la humanidad, ya en nuestro planeta geológico, es una realidad. Y estamos muchas veces acostumbrados a escuchar esa realidad de que se está acabando el planeta.
El nuevo libro de naturaleza aborda el tema de la resilvestración, que significa de recuperar y revitalizar los ecosistemas, nos muestra en particular, casos de éxito en la conservación de la naturaleza, que dan una esperanza de que se puedan revertir esos procesos.
Y un ejemplo muy claro es lo que ha hecho CEMEX por 25 años en la Reserva Natural El Carmen. De ser un sitio gris a ver un espacio de la diversidad biológica que florece, y más importante que sigue los avances evolutivos que la naturaleza tiene, si le damos esa oportunidad a la naturaleza. Ese es el mensaje que tiene este libro, dijo el director de Sostenibilidad y Agenda 2030 CEMEX México.
En la primera página del libro dice Regresando del Borde del Abismo. Y la Reserva Natural El Carmen, es un ejemplo ya que prácticamente estaba al borde del abismo. Cuando se establece la Reserva, todos los procesos de degradación se detienen, retirar todo el ganado, frenar la sobreexplotación que estaba en esa área, y automáticamente empiezan su ciclo de recuperación.
Y es lo que está ocurriendo prácticamente ahora en la Reserva Natural del Carmen destaca el concepto y la estrategia de sostenibilidad, pero los esfuerzos de conservación que se han hecho en la compañía, evidentemente han evolucionado. Y si bien es el programa Insignia, sabemos que hay muchas otras acciones en las diferentes operaciones.
Jonas Delgadillo Villalobos, Jefe de Operaciones de la Reserva Natural El Carmen explicó que a finales de los años 90´s , la zona de Maderas de El Carmen en el estado de Coahuila era un área de mucha riqueza biológica, un corredor biologico que cruza la frontera hacia el Parque Nacional Big Bend en el estado de Texas.
Ahí era prácticamente una parte gris, muchas de las cosas habían desaparecido, no había pastos, muchas especies de borrego cimarrón, berrendos, el bisonte, todo eso había desaparecido por una historia de más de 100 años de explotación, extracción de madera, cacería furtiva, aprovechamiento de recursos forestales no maderables, todo eso había hecho prácticamente un desastre ecológico ahí.
CEMEX tiene esa visión de adquirir tierras para conservar, prácticamente una de las primeras cuestiones fue descansar el terreno con el retiro de ganado, fue lo primero que se hizo, increíblemente en los primeros 5 años el pasto empieza a regresar, los matorrales a recuperarse y mucho del hábitat de la fauna; entonces nosotros ayudamos a esa resinfestación reintroduciendo especies, empezamos con el borrego cimarrón, seguimos con los berrendos, el más recientemente con el bisonte, señaló Delgadillo Villalobos.
El libro Rewinding es un llamado al futuro que tenemos como humanidad
Alejandro Espinosa Treviño, líder de Conservación Ambiental Sostenibilidad Global para CEMEX, manifestó que el libro Rewinding es un llamado a la acción que adicional a conocer la gran biodiversidad que tenemos en nuestro planeta, tenemos que hacer algo para que esa gran biodiversidad, esa naturaleza, siga existiendo. Y uno de los mensajes claves que tiene este libro de Rick Wiling, es precisamente eso; El futuro de estos espacios silvestres que existen actualmente va a ser el mismo futuro que tenemos como humanidad.
Vamos ligados a la madre naturaleza. Entonces uno de los mensajes claves de esto es que la naturaleza, si le damos la oportunidad, le damos el tiempo, puede restaurarse, puede volver a los ecosistemas funcionales.
El libro aborda muchos ejemplos que van desde Argentina, Colombia, México. Y particularmente en México y Estados Unidos tenemos un ejemplo claro del trabajo que ha hecho CEMEX en estos 25 años, que es restaurar un sitio, volverlo a ser silvestre, y sobre todo darle un espacio a la naturaleza para que vuelva a sentirse casa y vuelva a surgir en todos esos ecosistemas, comentó Espinosa Treviño.
CEMEX desde hace varios años está ejecutando acciones para ayudar a revertir los efectos del cambio climático, sabiendo que un giro como el nuestro, que es la producción de cemento, materiales de construcción, pues tiene efectos sobre el medio ambiente, expresó Medina Ayala.
Nuestra contribución a ese problema, es a través de la estrategia de sostenibilidad Futuro en Acción, que está conjuntando todas las acciones como descarbonizar nuestros procesos, ofrecer productos sostenibles, basarnos en principios de economía circular, y lo interesante de esto es que podemos hablar el mismo idioma en todas las operaciones de CEMEX que tiene en el mundo, es decir, Futuro en Acción está en Colombia, Croacia, Alemania, México y hablamos el mismo idioma, pero cada operación tenemos nuestra hoja de ruta que incluye todas estas acciones.
Ahora, parte de Futuro en Acción están todos los esfuerzos que hacemos en el pilar de biodiversidad, que implica restaurar también los espacios que hemos utilizado para extraer las materias primas que tenemos, pero también ayudar a fomentar la educación ambiental y la preservación de ecosistemas, y el programa estandarte que tenemos es precisamente la Reserva Natural del Carmen.