Ciudad de México.- El Día de Muertos es una de las fiestas características de los mexicanos. En estas fechas, las familias acostumbran acudir a los panteones a honrar a sus difuntos, pero también suelen poner un altar en sus casas, adornar negocios, centros comerciales, restaurantes, entre otros.
De acuerdo con una encuesta realizada por el Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE) de 2017, el Día de Muertos es la tradición más importante para los mexicanos, ya que 73.6% la celebra.
En esta ocasión, la celebración será diferente. Las autoridades en la mayoría de los estados han anunciado que cerrarán los panteones para evitar grandes concentraciones de personas. Sin embargo, seguiremos recordando a nuestros seres queridos desde casa.
Alrededor del 70% de las familias mexicanas colocan una ofrenda de Día de muertos en sus hogares. De acuerdo con cifras dadas a conocer por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en años anteriores, los mexicanos gastan en promedio un total de 934.55 pesos. Por ello, esta fecha resulta clave para giros como boneterías, mercerías, papelerías, materias primas y dulcerías, muchos de los cuales se han visto afectados por la pandemia.
Recordemos que en un altar no pueden faltar: velas y veladoras; papel picado; calaveritas de azúcar, chocolate, amaranto o cerámica; fruta, comida, flores de cempasúchil; y por supuesto, pan de muerto, y la comida y bebidas favoritas de nuestros fieles difuntos.
Por ejemplo, en cuanto a la venta de pan de muerto, según una encuesta llevada a cabo entre octubre de 2019 y marzo de 2020 por el sitio Statista, casi 94% de los entrevistados afirmó consumir pan de muerto.
Y en cuanto a la venta de cempasúchil, se debe destacar que son 14 estados los que se dedican a su cultivo entre ellos Guanajuato, Hidalgo, Michoacán, Estado de México y Ciudad de México. Para satisfacer la demanda en esta época se requieren de 1,500 hectáreas de flores de temporada como cempasúchil, crisantemo, gladiola, terciopelo, rosa, nube y alhelí, entre otras, lo que deja una derrama económica estimada de 1,111 millones de pesos.
Por su parte, para los restaurantes esta fecha implicaba entre 25 y 30% de incremento de sus ventas, por lo que organismos como la CANIRAC en diversos estados como Baja California, Hidalgo y Puebla están tomando todas las medidas de sanidad necesarias para recibir a los comensales que decidan acudir a este tipo de establecimientos.
La celebración del Día de Muertos fue nombrada proclamada en noviembre del 2003 como Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO y en 2008, quedó formalmente inscrita.